Para llevar a cabo el diseño de nuestro estudio
debemos tener en cuenta cuatro criterios: la finalidad de este, su secuencia
temporal, si se controlan los factores de estudio y la cronología de este.
En función de la finalidad nuestro estudio puede ser
analítico o descriptivo: es analítico cuando existe relación entre dos
variables y descriptivo cuando se describe sin buscar relación entre las dos
variables. Según la secuencia temporal puede ser transversal, porque se da en
un momento del tiempo o longitudinal, que significa que el estudio necesita un
lapsus de tiempo para que se lleve a cabo. Según el control de la asignación de
los factores de estudio puede ser experimental u observacional y en función de
la cronología puede ser: prospectivo, que significa que primero intervenimos y
luego obtenemos los resultados o retrospectivo que se da cuando ya tenemos los
resultados y queremos intervenir.
Por lo que, una vez sabido esto, a la hora de
clasificar los estudios analíticos primero debemos saber si existe control del
factor de estudio, si es que no se trata de un estudio observacional en el cual
la formación de los grupos de estudio se realiza en función de la enfermedad y
serían o estudios de cohortes o estudios de casos y controles. Si, por el
contrario, si se controla el factor de estudio se trata de un estudio
experimental, en el cual si existe un grupo de control se trata de un ensayo
controlado y si no se trata de un ensayo no controlado. Dentro de los ensayos
controlados si la asignación de estos grupos es aleatoria estamos hablando de
un ensayo clínico aleatorio, si por el contrario la asignación de estos grupos
no es aleatoria ya hablaríamos de un ensayo clínico no aleatorio.